Por Gabriela Trillo Aguilar

Informar es la pasión de Moisés Rodríguez, un periodista de trayectoria impecable que ha demostrado su talento a través de las pantallas de Televisión Española, y hasta el momento, como presentador del Canal 24 Horas mantiene su fascinación por el periodismo.

El hecho de comunicar e informar sobre lo que pasaba a su alrededor, lo lleva a estudiar este oficio que él mismo califica como “la profesión de su vida” y que le ha dado la posibilidad de especializarse en diversos temas de actualidad o históricos, conocer personajes, viajar y dibujarse una perspectiva más amplia de las cosas.

El periodismo es una gran responsabilidad, si el profesional es consciente de ello pero además lo compagina armoniosamente con su cotidianidad, se convierte, como lo es para este importante comunicador, en un “estilo de vida”.

“Al cabo de los años, he acabado haciendo del periodismo un estilo de vida que me ha llenado en todos los sentidos. No lo cambio por ninguna otra profesión”, afirma Rodríguez, quien no deja de lado su preocupación por la frivolización del oficio. En sus palabras, el periodista nunca tiene que ser el protagonista, la noticia sí. Así, condena las prácticas poco éticas para hacerse notar.

“Por desgracia, en estos momentos en el que el famoso y la celebridad se ha impuesto a la profesionalidad, el ser periodista muchas veces pierde prestigio. Sin credibilidad, no somos  nada. El periodista es mucho más que el que sale presentando o en la tele. Y ese estatus de credibilidad hay que volver a recuperarlo”, explica.

Rodríguez, aunque admite sentirse realizado y orgulloso con su profesión, no solo por lo que ha conseguido, sino por la forma en que lo ha conseguido, tiene aún muchos sueños por cumplir. Tras 30 años de carrera, confiesa que tiene una segunda gran pasión: la historia. “De no haber elegido el periodismo tal vez hubiese sido historiador, me apasiona y me resulta fascinante”.

El presentador de Canal 24 Horas, es sin duda un profesional integral que ejerce con la mayor ética posible, pero además de su entrega al periodismo es un amante de la buena gastronomía.

¿Qué es lo que más te gusta comer?

M.R.: Como de todo. Tengo la suerte de que en casa, mi abuela y mi madre han sido y son excelentes cocineras. Lo importante es comer sano.

¿Dulce o salado?

M.R.: Dulce

¿Café o té?

M.R.:

¿Cuál es tu plato de temporada favorito?

M.R.: Cualquier plato de la cocina española. Y cada momento tiene en su plato.

¿Qué opinas de la gastronomía española? y de otros países… ¿Cuál es la que más te atrae?

M.R.: La cocina española es la más rica y variada del mundo. He viajado muchísimo por todo el mundo y lo confirmo. Muchos países aportan una gastronomía rica y es bueno aprender y probarlas todas, porque son espléndidas. Pero la española es la mejor. Tal vez la cocina italiana sea la que más me seduce. Siempre he disfrutado de la comida, tanto en España como viajando por el mudo, por lo que todas las experiencias culinarias han sido interesantes.

¿Qué opinas de la relación que hay actualmente entre los medios de comunicación y la gastronomía?

M.R.: La relación es buena. Creo que los medios hemos dado, por fin, la importancia y promoción que la cocina se merece en esta sociedad. Pero hay que tener cuidado. La saturación de información y programas en los medios pueden causar hartazgo en el destinatario y eso es peligroso. En la justa medida, ambos mundos se necesitan y se retroalimentan.